En su primera cita, él le regaló una flor y un chocolate. Cada mes, él le daba regalos increíbles y la llevaba cenar a los restaurantes más famosos de la zona. Todos sus amigos los veían como la pareja perfecta.

Todas las noches, antes de irse a dormir, él la obligaba a hacer todo lo que él quería... y todas las mañanas amanecía con un chocolate decorando su almohada.

Algunos días, él dejaba su rostro y su cuerpo lleno de dolorosas marcas que tenía que cubrir con maquillaje y ropa que le cubriera todo el cuerpo... pero todas las mañanas, después de esos "incontrolables arranques", él le enviaba chocolates y rosas para disculparse.

El día de la boda "por accidente" él quemó su brazo con fondue de chocolate, solo porque abrazó por demasiado tiempo a su amigo de la infancia... Pasó parte de su noche de bodas en el hospital, curando la herida.

Desde el primer día de casados, no hubo un chocolate más, porque él no quería que ella perdiera la figura, mucho menos porque quería que se embarazara pronto y volviera a ser delgada rápidamente...

Todas las noches seguía pasando lo mismo, los periodos entre peleas eran cada vez más cortos y los regalos por culpa se perdieron por completo, él tenía todo lo que quería y ella no podía dejar de pensar en cuánto se arrepentía de haber aceptado ese chocolate y esa flor en la primera cita...